domingo, 22 de diciembre de 2013

BLANCA Navidad y tortilla de patata.

Lo mínimo que se merece es este post.  Seguramente, Blanca no lo leerá, no creo que sea internauta pero, su acto es merecedor de esto y, mucho más.  Hoy, domingo, hemos ido a preparar los pedidos y encargos que tenemos para mañana lunes, pasado es martes Noche Buena.

Ayer, sábado, comentábamos que teníamos que ir a trabajar el domingo.  Estaba BLANCA, una clienta de hace muchos años y, preguntó:  ¿abrís mañana?  Nooooooo, contestamos, pero tenemos que venir a preparar.  Sin pensárselo dijo:  Os bajaré una tortilla de patata para que almorcéis.  Nooooooo, Blanca, gracias pero, bastante trabajo tienes con lo tuyo como para...  Si, si,  os haré una tortilla.  ¿A qué hora  vais a almorzar?  ¿A las once? 
Gracias Blanca, te lo agradecemos en el alma pero, ...

Total, que hoy (domingo, víspera de Noche Buena) suena el teléfono:

_ Si, dígame.
_ ¿Carnes Marisa?
_ Si...
_ Soy Blanca:  Os he preparado una tortilla de patata.  Os la bajo en tres o cuatro minutos.

????????????

No es Genial!  Hace frío.  Estamos a -1ºC, cuando hemos venido a trabajar.  Probablemente, ahora estemos a  0ºC.  Tengo frío.  Hoy no hay calefacción en el mercado.  El mando de la calefacción la tiene un compañero que hoy no ha venido a trabajar.  ( No estamos abiertos al público)  ¿Tu sabes, el gozo sólo de pensar en un bocadillo calentito, pan recién hecho y, TORTILLA DE PATATA recién hecha?  ¿Y, casera?

Bueno, la esperamos en la puerta del mercado para que pueda entrar.  Llega, pasa y, nos trae la tortilla ¡calentita! y, con servilletas monísimas de papel.  En un plato bonito.  ¡Un lujo!  ¿No os parece maravilloso?

Todos hemos comido un trocito.  Yo, entre el pan (calentito!)

Sólo por eso, ¡merece la pena!  Alguien que, tiene su vida, muy ocupada ( se tiene que encargar de su marido enfermo, entre otras cosas)  Se ocupa de preparar el almuerzo de alguien que, siendo domingo, tiene que trabajar para que, el lunes y, martes (vísperas de Noche Buena y Navidad) vengan a recoger sus pedidos, preparados ya, todos nuestros clientes.  Realizados con toda la ilusión, nervios y, descanso.  Confiando en sus carniceros de toda la vida.

Pero, lo que queremos resaltar es que, una persona, BLANCA, con su vida, sus problemas, sus preocupaciones... Se ha acordado de nosotros!  ¿No es ese el Espíritu de la Navidad?

              ¡Gracias BLANCA, estaba buenísima, hemos entrado en calor y, nos ha cundido mucho más!